F.B.I.

Buenos Aires, Argentina martes 01.11.2016 COMPLICADÍSIMA APUESTA DE UN ABOGADO REPUBLICANO Últimos días de James Comey al frente del FBI Más allá de la 'operación de prensa' que apunta a que el comicio estadounidense se encuentra empatado (información que no siempre considera que se elige un Colegio Electoral, ni que para imponerse Donald Trump debería ganar el 100% de los votos 'swing' o sea de los estados que no son ni demócratas ni republicanos), es controversial el rol del Federal Bureau Information (FBI, la policía federal) a 1 semana del comicio, difundiendo información no concluyente sobre la responsabilidad de la candidata Hillary Clinton en la administración de su correo electrónico privado para la información gubernamental sensible. Bajo la lupa quedó el jefe del FBI, James Comey, quien al tema designó, desde fines de 2015, 100 personas de tiempo completo y 50 personas de medio tiempo. James Comey, director del FBI: si gana Hillary Clinton, estará de salida. La campaña presidencial de Hillary Clinton aumentó la presión sobre el director del FBI, James Comey, afirmando que si él autorizó la difusión de información no concluyente sobre la candidata presidencial demócrata, tendría que hacer lo mismo con su rival republicano Donald Trump. El viernes 28/10, el FBI difundió información sobre nuevos correos electrónicos que podrían tener relación con una investigación sobre el uso de un servidor privado por parte de Clinton cuando era secretaria de Estado pero Comey dijo que aún no sabía si los e-mails cursados eran relevantes. El director de campaña de Clinton, Robby Mook, cuestionó esa acción del director del FBI, y que éste no haya difundido, por ejemplo, información sobre la investigación vinculada al papel de Rusia en la elección estadounidense o los lazos con el comité de campaña de Donald Trump y sus asesores más cercanos "Si usted está en el negocio de divulgar información sobre investigaciones a candidatos presidenciales, divulgue todo lo que tenga sobre Donald Trump. Divulgue información sobre su relación con los rusos", dijo Mook a CNN. "Es inconcebible y el director Comey debe responder esto", agregó. Sin embargo, es conocido que Comey ha dudado que la acción de hackers contra la campaña de Hillary haya sido avalada por Rusia. Comey dice que el FBI ha investigado el papel de Rusia en la campaña presidencial y lazos con Trump o sus asesores, pero no se hallaron vínculos concluyentes, explicó el diario The New York Times. El matutino estadounidense criticó a Comey, acusándolo en un editorial de su edición del martes 01/11 de enviar "una carta breve, inescrutable que sacudió la elección" en una "decisión increíblemente precipitada e irresponsable". Las encuestas muestran que la ventaja de Clinton disminuyó desde la difusión de esa carta del FBI. La ex senadora tiene una ventaja de 5 puntos en el más reciente sondeo de Reuters/Ipsos, con un 44% de apoyo contra 39% del republicano, quien intensificó sus críticas contra Clinton. Quién es Comey En junio de 2013, Barack Obama nominó a James Comey para relevar a Robert Mueller al frente de la Agencia Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés). Comey era conocido como un jurista, de simpatías con el Partido Republicano aunque independiente en muchas de sus decisiones, que había trabajado como Nº2 del Departamento de Justicia durante la administración de George W. Bush y había ejercido de fiscal en Chicago, Richmond y Nueva York. Muchos esperaban que Obama nombrara a Lisa Monaco, quien traba jaba en la Casa Blanca, había sido jefa de gabinete de Mueller y conocía por dentro el FBI. Pero designar a Comey suponía algunas ventajas para Obama: su prestigio profesional y su condición de republicano facilitarían su confirmación en el Senado. Algún senador demócrata mencionó las actividades de Comey en Wall Street como un posible obstáculo a su nombramiento. Pero el Senado confirmó su designación con 93 votos y 1 voto en contra: el del senador libertario Rand Paul. Pero ahora la independencia de Comey quedó bajo polémica cuando a 11 días de las elecciones presidenciales, él anunció la reapertura de la investigación sobre el servidor privado para correos electrónicos que la candidata demócrata, Hillary Clinton, usó cuando era secretaria de Estado (2009-2013). En una carta dirigida al Congreso, Comey informó que durante una investigación a la expareja de una asesora de Clinton la agencia había encontrado nuevos correos "pertinen tes" para conocer si la candidata demócrata puso en peligro la seguridad nacional cuando era secretaria de Estado. Los republicanos, quienes lo criticaron cuando en julio Comey cerró las pesquisas y recomendó que Hillary no fuera imputada, ahora lo elogiaron. Los demócratas, en cambio, ahora lo cuestionaron y dijeron que su carta estaba "llena de insinuaciones y vacía de datos". El líder de los demócratas en el Senado, Harry Reid, llegó a decir que Comey pudo haber violado la legislación vigente al revelar que el FBI estaba investigando a Clinton, cuando el texto prohíbe a funcionarios usar su posición para influir en una elección. Hijo de una familia de origen irlandés, Comey nació en 1960 en Yonkers (Nueva York), pero creció en Allendale (Nueva Jersey), donde cursó hasta la educación secundaria. En 1982 se graduó en la Universidad William y Mary de Virginia, especializándose en Química y en Religión Comey se educó como católico pero se hizo metodista durante sus años en la universidad. Su proyecto de fin de carrera versó sobre los escritos del teólogo progresista Reinhold Niebuhr y del líder evangélico Jerry Falwell, cuyo hijo es un seguidor incondicional de Donald Trump. Ninguna experiencia marcó tanto al director del FBI como la muerte de su hijo Collin, quien falleció en 1995, a los 9 años por una infección bacteriana. Comey y su esposa Patrice denunciaron a los médicos y al hospital por negligencia. Al final retiraron la denuncia a los médicos y llegaron a un acuerdo económico con el hospital, que se comprometió a aplicar unos protocolos para que no vuelva a ocurrir algo similar. El caso Bush En 1985 se doctoró en la Universidad de Derecho de Chicago. Entonces inició una ascendente c arrera como abogado. Él ya fue protagonista de controversias en marzo de 2004, cuando era el Nº2 del Departamento de Justicia. La Casa Blanca quería extender un polémico programa de escuchas telefónicas que inició tras el ataque del 11/09/2001, cuando George W. Bush ordenó al FBI "adoptar una mentalidad de guerra". Los agentes del FBI, dirigidos entonces por Robert Muller, rastrearon miles de llamadas telefónicas, correos electrónicos y direcciones de internet. El jefe de Comey y fiscal general de la época, John Ashcroft, se encargó de autorizar cada 45 días programas de investigación secretos bajo el código Stellar Wind. El número de personas conocedoras de esos programas dentro de la Administración era muy reducido, pero Comey estaba entre ellos, y creía que estas prácticas violaban algunos de los pilares constitucionales. El 04/03/2004 , Comey aconsejó a Ashcroft que no volviese a autorizar Stellar Wind. Esa misma noche el secretario de Justicia sufrió una severa pancreatitis que dejó al actual responsable del FBI como jefe en funciones de la Justicia estadounidense. Entonces, Bush envió a sus colaboradores Andrew Card y Alberto Gonzales a visitar a Ashcroft en el hospital para hacerle firmar un documento que autorizara su decisión, sabiendo que Comey se negaría a hacerlo. Al enterarse, Comey corrió al centro de salud a cortarle el paso a Card y Gonzales. "Yo estaba enojado", dijo años después. "Acababa de ver cómo intentaban aprovecharse de un hombre muy enfermo y que por eso me había transferido sus poderes". Comey amenazó con dimitir y sólo se echó atrás cuando Bush se comprometió a hacer cambios al programa que pretendía extender. Más adelante C omey ayudó a despedir a Gonzales como fiscal general. El testimonio de Comey desveló que Gonzales no había almacenado notas confidenciales según era su deber y eso forzó su final. Durante unos años abandonó el servicio público y trabajó para varios bufetes de abogados en Connecticut y Nueva York. Más adelante, Comey regresó a la función pública y estuvo en los medios cuando, durante sus años en Nueva York, procesó por estafa a la famosa presentadora Martha Steward. También procesó a un integrante de la familia mafiosa Gambino. E investigó por fraude a varias compañías de Wall Street. En los años '90, Comey participó de la comisión del Senado que investigó el 'caso Whitewater', un escándalo que puso la lupa los intereses inmobiliarios de los Clinton en Arkansas, estado que gobernó Bill antes de la Casa Blanca. Y cuando trabajaba a las órdenes del entonces fiscal Rudy Giuliani procesó por evasión fiscal al millonario Marc Rich, quien se había beneficiado de un indulto que le concedió Bill Clinton cuando se retiraba de la Casa Blanca. Tanto Rich como otros indultados habían donado dinero a la biblioteca de Bill Clinton y a la campaña de Hillary para el Senado. La historia reciente Hillary Clinton ha sido objeto de numerosas críticas y acusaciones de negligencia por haber utilizado una cuenta particular para asuntos de interés nacional. Pero Comey dio por finalizada su investigación en julio y recomendó que la candidata no fuera imputada. Si bien el republicano por años Comey ha manifestado que ya no milita en ningún partido político, muchos consideraron su nombramiento al frente del FBI como un gesto de Obama en busca de acuerdos bipartidistas. “Nunca supe muy bien si Jim era demócrata o republicano”, afirmó su colega Eric Holder, quien trabajó con él en sus años como Nº2 de Janet Reno durante el mandato de Bill Clinton. “Me parecía un buen tipo, nada más”. Pero Comey fue aportante de las campañas presidenciales de los 2 rivales de Obama: John McCain, en 2008, y Mitt Romney, en 2012. Comey ha investigado a los Clinton al menos en 3 ocasiones pero un medio cercano a los Clinton, tal como lo es el diario The New York Times, editorializó en 2001: “Sería una elección sólida”, cuando se discutía el posible nombramiento de Comey como fiscal del Distrito Sur de Nueva York. “El puesto requiere alguien con una fuerte experiencia como fiscal federal y una reputación de independencia y Comey tiene ambas”. Comey asumió el cargo unos meses después del ataque contra las Torres Gemelas y al principio su designación n o contentó a nadie. El gobernador republicano George Pataki quería a un candidato más conservador y el senador demócrata Chuck Schumer hizo campaña por un aspirante más a la izquierda. Hillary Clinton optó por no sugerir ningún nombre porque el designado debía investigar los indultos que su esposo anunció justo antes de abandonar la Casa Blanca el año anterior. Comey había ganado notoriedad con el caso del yihadista francés Zacarias Moussaoui, procesado por su papel en los atentados del 11/09/2001. La actitud de Comey durante aquel proceso judicial que se demoró durante años exhibió un enorme respeto por la ley en un momento en el que el Gobierno federal no dejaba de buscar atajos para combatir el terror: “Jim cree que tenemos que ofrecer una respuesta judicial al terrorismo”, explicó un alto funcionario que lo conoce bien.