TRAMPAS DIVERSAS

El País (Uruguay) - 11-Abr-10 - Opinión

http://www.elpais.com.uy/10/04/11/lault_481821.asp

La Última / La otra orilla
Trampas diversas

por Julia Rodríguez Larreta

El viaje a Estados Unidos de Cristina Kirchner, a cuya comitiva se integró también Néstor, a pesar de lo poco que le gustaba viajar -¿recuerdan sus insólitos "faltazos" como Presidente?- debería tener un sabor agridulce. Porque si bien, ser parte de la Cumbre Nuclear junto a otros 40 mandatarios y tener previsto un encuentro con grandes empresarios norteamericanos, no es poca cosa, no todo es miel sobre hojuelas. Su ambición de reunirse con Obama a solas, no fructificó y para peor, el juez Thomas Griesa confirmó un embargo a las reservas del Banco Central argentino, depositadas en Estados Unidos, en plena trifulca local por la intempestiva decisión del gobierno de hacer uso de esos fondos de manera nada ortodoxa. Fue justo antes del lanzamiento de un anunciado plan de canje.

Aunque sus recientes declaraciones, comparándose con Sarmiento, al anunciar un proyecto de computadoras para los niños, o con "Keops frente a la pirámide terminada", al inaugurar algo de energía en una provincia sureña, demuestran un ego a prueba de bombas.

Según el último sondeo trimestral que realiza CMA sobre Credit Default Swaps que estudia el costo de asegurar deuda contra incumplimientos, los títulos argentinos han sido considerados los segundos más riesgosos del mundo. Solo le gana en ese no recomendable lugar, Venezuela, que figura en el primer puesto. Ranking donde cuanto más abajo mejor.

A su vez, con la manipulación de los resultados que elabora el INDEC, estrategia a la que el gobierno de los K. se ha abocado sin pudor alguno, éste se ha "ahorrado" una suma que ronda los $1.000 millones, de acuerdo a la consultora M&S, dado que parte de la deuda oficial pesificada ajusta su capital por el CER, (Coeficiente de Estabilización de Referencia).

Con el manipuleo oficial de los índices, la deuda pública se presenta como mucho menor de lo que en realidad es. Según los datos oficiales, entre 2007 y 2009, aumentó U$S 12.000 millones de acuerdo a la capitalización del CER, pero las estimaciones privadas, teniendo en cuenta la inflación real, indican U$S 27.000 millones.

Con una inflación verdadera proyectada para este año de 25%, si el gobierno solo reconoce una de 10%, obtendrán U$S 5.000 millones a su favor en el año.

Mientras tanto, cada día que pasa sin que el DNU, (Decreto de Necesidad y Urgencia), herramienta utilizados para extraer las reservas del Banco Central, sea rechazado en el Congreso porque la oposición no se consolida, es un triunfo para la Presidenta. Queda de manifiesto, lo endeble de la cohesión opositora en la Cámara de Representantes. O les falta quórum o no hay los votos, lo mismo que en el Senado, donde nuevamente la desaparición de Menem ha jugado a favor de los Kirchner, opuestos a una ley de coparticipación del cheque buscada por los gobernadores para asegurarse recursos.

Aún cuando la postura oficial sea compartible -en cuanto el proyecto significa atornillar un impuesto completamente distorsivo-, se debe a malas razones. Seguir dominando a las provincias a través del manejo de los fondos que luego el gobierno otorga o retacea, según quien sea.

Claro ejemplo de ello es lo que le hacen a Macri, continuamente privado de recursos. Y dentro de esa guerra sorda para eliminar adversarios, levanta no pocas suspicacias el llamado a declarar al Jefe de la Ciudad de Buenos Aires por un caso de escuchas telefónicas. Una situación compleja en la que si Macri logra probar su inocencia, sus chances políticas se agigantarán, como le sucedió a De Narváez, a quien se acusó en plena campaña eleccionaria por el asunto de la efedrina, quedando en evidencia que se trató de una maniobra para destruirlo. Sería lo que le pasaría a Macri si es encontrado culpable.

Lo inquietante es que el Juez de la causa es el dudoso Norberto Oyarbide. El mismo que sobreseyó a Kirchner con una rapidez sospechosa en la acusación de enriquecimiento ilícito. El mismo que interviene en una causa que despide un olor a corrupción nauseabundo, sobre enriquecimiento de Ricardo Jaime, ex secretario de Transporte de ambos gobiernos K, al que puede que los Kirchner hayan decidido soltarle la mano.